¿Quieres saber si estas consiguiendo ponerte en forma? La báscula sirve como método de registro y seguimiento de cada individuo, pero debemos tener en cuenta de que no es la única herramienta para medir el progreso.
En un proceso de pérdida de peso, existen muchas maneras de medir el progreso y de confirmar que lo que estás haciendo te está acercando a tu objetivo.
¿Cómo medir el progreso?
- Medidas antropométricas: Los parámetros corporales guardan relación con la cantidad y calidad de lo que se come, así como de los cambios que estas sufriendo al perder grasa o ganar masa muscular.
Con una cinta métrica medir los contornos de la cintura, caderas, abdomen, muslo y brazo, es una forma sencilla de medir la perdida de grasa. Suele darse más rápido una disminución de estas medidas que del propio peso.
- Fotografía: La fotografía de forma periódica cada 14 a 30 días se podrá observar el progreso, para ello se debe tomar la fotografía de frente, otra de perfil y otra de espaldas. Además, será fundamental realizarlo siempre en las mismas condiciones, en el mismo sitio, el mismo momento del día y con la misma ropa.
- La talla de la ropa: Ponerte una prenda que antes no te quedaba, bajar la talla del pantalón o que la ropa no apriete y te sientas mejor con ella, es sinónimo de mejora de composición corporal.
En perdida de grasa o ganancia de masa muscular, es útil hacer un seguimiento de la evolución de los parámetros, esto te permitirá hacer algún cambio en tu plan, ya sea ajustarlo o encontrar los errores.
Consejos útiles (Tips)
- Es recomendable al momento de pesarse, utilizar las mismas condiciones y en ayunas.
- Recordar que el peso no es lineal y se ve afectada por el ejercicio físico, la hidratación o la fase del ciclo menstrual.
- Las balanzas de bioimpedancia, es otra opción para determinar tu progreso, pero esta debe estar bien calibrada.